Finalista del pasado Premio Anagrama de Ensayo, Jorge Carrión desgrana en este ameno ensayo qué es eso de las librerías y qué importancia histórica y vital han tenido a lo largo de la historia tanto para la colectividad como para el individuo. En los diferentes ensayos sobre libros, siempre han cobrado mayor importancia las bibliotecas que las librerías. Con este ensayo mezcla de narrativa de viajes y pasión por las librerías, Jorge Carrión viene a llenar ese hueco que faltaba para los amantes del papel.
Prescriptores, agitadores culturales del barrio, o simplemente amigos, los libreros han tenido y tienen gran importancia en la sociedad. Desde la mítica Shakespeare and company de Sylvia Beach y la de su compañera La maison des amis des livres, de Adrienne Monnier en la Rive Gauche del Sena, donde se dieron cita Joyce, Hemingway, Prévert, o Scott Fitzgerald; pasando por City lights, regentada por Ferlinghetti en San Francisco, donde se reunía la generación beat; hasta llegar a la actual Pequod llibres de Barcelona, donde Pere y Consuelo llevan ya algunos años poniendo patas arriba el barrio de Gràcia.
De la mano de Carrión deambulamos por librerías de los cinco continentes, desde lo histórico a la anécdota del propio autor con estos establecimientos, como el regateo por conseguir un determinado libro hasta tal punto de ir todos las tardes a preguntar por el precio y ofreciendo un poco más en su contraoferta y acabar llevándoselo el último día por el precio original que impuso desde el primer momento el librero. Que Hitler o Mao fueran amantes de los libros, incluso el dictador chino trabajó en una librería, y que ambos escribieran el suyo propio y bajo su mandato se prohibieran o quemaran cientos de títulos da una muestra del poder real de los libros y de lo indispensable de las librerías, más allá de modas, como con buen juicio señala Carrión en la crítica que hace a esos espacios donde se ha preocupado uno más por la estética que por el contenido. Se ha preferido invertir más en el arquitecto y en el decorador de interior que en el fondo de la librería.
Claro que este es un libro para amante de los libros. Eso es obvio. Pero creo que también es un buen libro de viajes, luego por ahí puede tener algunos lectores más. Además es un libro curioso que puede saciar algún apetito hambriento de nuevos artefactos literarios. Aquí tiene su libro.
Prescriptores, agitadores culturales del barrio, o simplemente amigos, los libreros han tenido y tienen gran importancia en la sociedad. Desde la mítica Shakespeare and company de Sylvia Beach y la de su compañera La maison des amis des livres, de Adrienne Monnier en la Rive Gauche del Sena, donde se dieron cita Joyce, Hemingway, Prévert, o Scott Fitzgerald; pasando por City lights, regentada por Ferlinghetti en San Francisco, donde se reunía la generación beat; hasta llegar a la actual Pequod llibres de Barcelona, donde Pere y Consuelo llevan ya algunos años poniendo patas arriba el barrio de Gràcia.
De la mano de Carrión deambulamos por librerías de los cinco continentes, desde lo histórico a la anécdota del propio autor con estos establecimientos, como el regateo por conseguir un determinado libro hasta tal punto de ir todos las tardes a preguntar por el precio y ofreciendo un poco más en su contraoferta y acabar llevándoselo el último día por el precio original que impuso desde el primer momento el librero. Que Hitler o Mao fueran amantes de los libros, incluso el dictador chino trabajó en una librería, y que ambos escribieran el suyo propio y bajo su mandato se prohibieran o quemaran cientos de títulos da una muestra del poder real de los libros y de lo indispensable de las librerías, más allá de modas, como con buen juicio señala Carrión en la crítica que hace a esos espacios donde se ha preocupado uno más por la estética que por el contenido. Se ha preferido invertir más en el arquitecto y en el decorador de interior que en el fondo de la librería.
Claro que este es un libro para amante de los libros. Eso es obvio. Pero creo que también es un buen libro de viajes, luego por ahí puede tener algunos lectores más. Además es un libro curioso que puede saciar algún apetito hambriento de nuevos artefactos literarios. Aquí tiene su libro.
Un libro que tengo muchas ganas de tener entre mis manos, a ver si cae... Un saludo.
ResponderEliminarEstos son los viajes que más me gustan. Anotado queda.
ResponderEliminarUn saludo,